Steam: el fin de una era

Cualquier persona con un mínimo conocimiento del mundo de los videojuegos y sus plataformas, posiblemente conocerá Steam. Steam es una plataforma online con millones de usuarios y que responde a la necesidad de aportar un medio para jugar a videojuegos fuera del mundo de las grandes empresas de las principales consolas (Sony, Nintendo, Microsoft). Steam no solo ofrece un inmenso catálogo de juegos que abarca casi todos los juegos antiguos y de actualidad de pequeños y grandes desarrolladores, si no un medio de almacenamiento digital asociado a tu cuenta que te permite almacenar tus juegos y descargarlos o desinstalarlos a tu gusto cuando quieras, así como una nube que guarda tu progreso
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 Para apreciar lo grande de esta plataforma es necesario analizar las consolas. La única motivación real que tiene un jugador para elegir una consola en lugar de un ordenador, son los juegos y sagas exclusivos inherentes a un dispositivo en concreto. Más allá de eso un ordenador es mejor en todos y cada uno de los sentidos. Según el dispositivo, un ordenador es muchísimo más potente y permite una mejor experiencia de juego que una consola limitada a un mismo hardware durante toda una generación. Además las Steam ofrece rebajas muy económicas periódicamente en muchos de sus juegos y ofrece acceso a los juegos de género indie, es decir, de pequeños estudios de programación. Es por eso que desde su lanzamiento en 2003 por la empresa Valve Studios y su principal desarrollador Gabe Newell, ha ido ganando cada vez más prestigio y poder arrebatando el monopolio del videojuego a las plataformas de consolas.